¿Se puede lucir un cuerpo 10 y tener más de una talla 40? Sin duda. La prueba está en la calle, pero también en la pasarela y las últimas portadas de revista protagonizadas por modelos como Gigi Hadid o Ashley Graham, que ha ocupado la primera página de Sport Illustrated, un espacio dedicado a modelos como Kate Upton o Heidi Klum en otras ocasiones. Y es que la 44 es la talla más vendida de todas, y según el Ministerio de Sanidad, el 40% tiene problemas para encontrar prendas de sus medidas.

Cada vez son más las mujeres curvy que presumen de cuerpo, y lejos de esconderlo y avergonzarse, lo miman y lo potencian. Un ejemplo: ¿Sabías que en algunas clínicas de medicina estética y cirugía plástica señalan a las mujeres curvy como las candidatas ideales a algunos de sus tratamientos porque su cuerpo es más fácil de trabajar y su piel, a menudo, también es más elástica?

No es noticia que un rostro lleno es menos flácido que otro delgado, y por lo tanto, de entrada parece más joven. Pero es que además, unos glúteos o unos pechos de una talla 42, a veces son más redondos y firmes que los de una mujer de una 36. Siempre que se siga una dieta sana y equilibrada, dejemos de obsesionarnos con los posibles kilos de más, y centrémonos en sacarnos el máximo partido tirando de la cosmética más efectiva y deliciosa.

Más allá de los tratamientos faciales, una mujer curvy puede aprovechar al máximo un anticelulítico, porque mucha de la grasa que le sobre, localizada, es más receptiva. Y a su vez, también puede responder mejor a los cosméticos encargados de disminuir la retención de líquidos, un problema asociado en ocasiones al volumen corporal. Así que, mujeres gorditas, desde Ikons Gallery os animamos a disfrutar de una cosmética que saque lo mejor de vosotras mismas, que es mucho.