Según los nutricionistas los españoles engordamos en verano y no precisamente con grasas saludables. La ingesta de frituras, helados y dulces aumenta en los meses estivales y ello se traduce en que de pronto nos encontramos con un “flotador extra”.
En los chiringuitos evita los fritos y las bebidas azucaradas. Opta por las ensaladas y los pescados a la plancha. Y en el hotel, cuidado con lo más peligroso: el bufé. Platos y platos de comida presentada de la forma más tentadora pero con mucha grasa y azúcar. Escoge de primero gazpacho o ensalada para asegurarte un buen aporte de vitaminas. Si hay marisco, tómate el que no tiene concha como el pulpo o los langostinos. Y ponte las gafas de sol para no ver con claridad los postres y coger el plato de fruta.
A la playa llévate un tupper saludable, aquí tienes algunas ideas de chuparse los dedos:
- Tabulé: muy fácil de preparar con tomate, pepino y el aderezo que te guste. También puedes añadir trocitos de falafel. Muy rico y saciante.
- Ensaladas de legumbres como por ejemplo con lentejas, frijoles o garbanzos. Añade tomate cherry, albahaca y queso feta.
- Ensalada de Sandía con cebolla, pepino, el zumo de un limón, cilantro, sal y pimienta. Súper refrescante y delicioso.
Bebe mucha agua, sobre todo en las exposiciones solares y enriquécela con el nutricosmético que la convierte en un potente tratamiento drenante, tonificante y purificante: Fit Water. Un plus que te ayudará a eliminar líquidos y bajar de peso.
Y lo más importante: disfruta. Es inevitable que nos excedamos en las comidas o en las cenas pero la clave está en la compensación. Si esto ocurre, puedes equilibrar tomando al día siguiente un Smoothie Dry que te puedes llevar a la playa o a la piscina. Un sustitutivo de comida con proteína 100% vegetal y con la cantidad diaria de minerales, proteínas y vitaminas recomendada por la EFSA. Puedes elegir entre sabor cacao, frutos rojos o verde y además viene con un shaker para prepararlo en segundos. ¡Y a pasarlo bien!